La Navidad ya se respira en cada rincón de nuestro colegio. Desde hace semanas, tanto en infantil, en primaria como en secundaria y bachillerato, hemos estado preparando los villancicos con mucho entusiasmo, incluyendo bailes que, sin duda, harán brillar las actuaciones de este año. Los más pequeños están llenos de ilusión, deseando mostrarles a sus papás todo lo que han estado ensayando con tanto esfuerzo y alegría.
Las aulas y pasillos también se han transformado: luces y adornos llenan el colegio de ese ambiente mágico que solo la Navidad puede traer. Es imposible no contagiarse del espíritu navideño mientras caminamos por los pasillos decorados. Entre todos, hemos creado un espacio que nos recuerda que la Navidad no es solo una fecha, sino una oportunidad para compartir y vivir la alegría juntos.
Además, este año hemos recibido una visita muy especial: los pajes reales. Su llegada fue un momento emocionante, especialmente para los más pequeños, quienes no pudieron ocultar su felicidad y sorpresa al verlos de cerca. Estos instantes hacen que la magia de la Navidad cobre vida en el colegio, uniendo a alumnos y profesores en una atmósfera única.
Pero la Navidad no solo se vive con adornos y canciones. Gracias a nuestros profesores, hemos estado preparando nuestros corazones para algo mucho más importante: la llegada de Jesús. Sus enseñanzas y actividades nos han ayudado a reflexionar y estar listos para recibirlo con amor y esperanza en nuestros corazones.
Ahora, mientras esperamos las vacaciones con muchas ganas, soñamos con pasar tiempo con nuestras familias, compartir momentos especiales y disfrutar del verdadero significado de la Navidad. Que esta época siga siendo para todos una fuente de alegría, unión y paz.
¡Feliz Navidad a todos!